martes, 4 de noviembre de 2014

INSUFICIENTE CADENCIA

   No importa dónde esté... No importa el plano en el que me captures. No me importa si me mides en milímetros o en distancia focal. No me importa si por las noches me ves a 15 fotogramas por segundo y por el día a 24. No te importa la cadencia a la que funciona mi corazón, ni si busco tu mirada en mi más cercano primer plano. Al fin y al cabo, soy sólo otro punto de vista... Un punto de vista que ni es el tuyo ni yo entiendo. No te culpo. Sólo sé que funciono. Sólo sé que registro momentos, y quedan grabados en mi interior. Momentos que en cualquier momento podría sobreexponer y regrabar para olvidarlos. Simplemente, paso. No voy a renunciar a mi forma de ser, a mi esencia. No voy a renunciar a la sensibilidad de mi película. Ni a mi cálida temperatura de color, que algún día dará calor a alguna historia afortunada.
   Soñamos nuestra propia historia genial. Por eso hacemos todo lo posible por hacerla realidad. Pero nunca nos da el encuadre para tanto. Los fotogramas no corren lo suficientemente rápido, y las panorámicas son siempre tan cortas. Nos servimos de elementos humanos para expresar lo que no comprendemos.
   Yo hace tiempo que dejé de comprender, y me dediqué sólo a expresar. Aún con todo, los fotogramas seguían siendo insuficientes, y las panorámicas no eran largas. Por eso, mi película aún no está terminada.


No hay comentarios:

Publicar un comentario